Inaugurar cualquier proyecto con una afirmación como la que Alex Trochut nos ha prestado para esta ocasión podría parecer
una paradoja vacía de sentido y no muy inteligente. O, en el mejor de los casos, un ejercicio de provocación más. Tan fatuo y
tan trillado como cualquiera de esas bravatas que estamos ya más que acostumbrados a ver. Nada más lejos de nuestra
intención. Old is cool es una vindicación de todo aquello cuyo valor es intemporal y trasciende el mero gesto de moda. Significa
voluntad de permanencia frente al consumo volátil de los productos culturales que se ha convertido en norma. Por eso la
edición en español de étapes: nace como una revista-libro, un bookazine que se resiste a plegarse a las exiguas fechas de
caducidad que impone el voraz ritmo de renovación del mercado editorial. Cuatro números al año con artículos que no caducan
y cuyo interés va más allá de la inmediatez de la tendencia.
Este hermano pequeño de la familia étapes: se apoya también en la experiencia de quienes ya han rodado. La edición francesa
(1994) y la edición internacional (2004) nos amparan. Heredamos su mirada global sobre el diseño y su deseo de acercar a los
lectores a una comprensión transfronteriza y transhistórica de la cultura gráfica. Pero entendemos que esto es imposible si se
ignora lo específico del contexto local y por tanto cada número incluirá artículos directamente relacionados con la diversidad y la
riqueza de los entornos español y latinoamericano.