Este libro estudia con maestría una batería de casos recientes de acciones y protestas que vinculan lo local y lo global. De los activistas obreros a los organizadores de la inmigración, de los ecologistas a los defensores de los derechos humanos, de los manifestantes por la justicia global a los militantes islamistas, el libro muestra cómo la gente común desarrolla nuevos puntos de vista, experimenta con nuevas formas de acción y, en ocasiones, adquiere nuevas identidades debido al contacto con el exterior. La obra se interroga sobre cómo y en qué medida el activismo transnacional transforma a los actores nacionales, sus formas de reivindicación y sus principales estrategias. ¿El activismo transnacional es simplemente la proyección a un ámbito más general de los conflictos y alineamientos habituales de la política nacional, o crea una nueva arena política en la que se funden la contienda interior y la internacional? Y, si es cierto esto último, ¿cómo afecta dicho desarrollo a la internacionalización y a la división tradicional entre política interior e internacional?