La superficie mural en un entorno arquitectónico muchas veces se ha entendido como una decoración, algo complementario a la arquitectura. Este estudio pretende mostrar cómo esa superficie mural no es un complemento sino que puede cualificar la arquitectura considerándose un elemento más de ésta, modificando la percepción del espacio, funcionando como un elemento arquitectónico más, aunque aparentemente intangible.
Este trabajo pretende estudiar, a través de la pintura mural y la arquitectura que la cobija, la relación entre el espacio y sus límites, como elementos esenciales para la compresión de la arquitectura. Por supuesto, teniendo en cuenta la ambigüedad generada debido a la capacidad que tiene la superficie mural se ser percibida como superficie, es decir límite, o como espacio.publiarq.com