La selección de obras, un resumen del trabajo de su primera década, hay que verla como una secuencia experimental, una sucesión de ensayos como ámbito cuasi científico de comprobación de intuiciones arquitectónicas, en las que se adivina una constelación de referencias dispares que van desde Sota a Koolhaas pasando por Archigram y el primer Foster, además de una extrema voluntad de originalidad y de expresión de una poética propia e instranferible