El estudio Pitágoras, establecido en Guimaraes, inició su actividad hace treinta años. Empiezan a trabajar durante un periodo muy estimulante de la arquitectura portuguesa; cuando el impulso económico motivado por el crecimiento de la Unión Europea y el debate disciplinar, altamente mediatizado, posibilitan y expresan la busqueda de nuevos y diferentes modos de pensar y de hacer arquitectura.
Su producción se caracteriza no por el uso de nuevos materiales, sino por el uso poco convencional de los mismos; a la vez que por un uso valiente del color y las texturas. A menudo hablan de rehabilitar materiales que han sido estigmatizados por un uso inadecuado.